Como se ha mencionado anteriormente, los sacos de rafia se utilizan como embalaje para diversos sectores debido a su alta resistencia y porque ofrecen ventajas únicas frente a otros materiales menos robustos, como el yute.
La rafia de plástico se caracteriza por ser un material resistente y, por ello, se aplica en la fabricación de fibras sintéticas textiles o bolsas, entre otros productos. Al trenzar sus hilos, se obtienen los sacos de este material y estos suelen ser utilizados, generalmente, en el empacado y envasado de productos a granel.
Usos de los sacos de polipropileno
Cuando los sacos de rafia o polipropileno son nuevos, se pueden utilizar en el sector alimentario para empacar carnes, granos, cereales y otros productos alimenticios. También suele darse su uso en el sector químico para el almacenamiento y envasado de productos concentrados.
Cuando son reutilizados, debido a que estos sacos se pueden lavar, no es recomendable su uso en sectores químicos ni alimentarios. Por el contrario, este tipo de envase usado sí puede utilizarse para recolectar basura o para contener materiales que no requieran cuidados especiales, como fertilizantes. Por lo tanto, en el sector agrícola es también muy extensa su utilización en el envasado de arroz, pienso, semillas o harina.
Por supuesto, en el sector doméstico también tienen propiedades favorables. Estos sacos son muy recomendables para mantener el orden y la limpieza tanto en la parte interior, en armarios para organizar objetos; como exterior de la vivienda, en el jardín, trastero o garaje.
Características de los sacos de rafia PP:
Es conveniente conocer las características más llamativas de estas bolsas de polipropileno:
- Son altamente resistentes a las inclemencias del tiempo como el sol o la lluvia.
- Se puede imprimir en su superficie cualquier logotipo, fotografía o texto informativo para controlar el material que hay en el interior. La rafia evitará que la tinta traspase la bolsa y se impregne en lo que contiene.
- Pueden cargar elementos pesados. Tienen una capacidad de peso mayor que otros productos del mercado.
- Tienen una vida útil muy larga, al ser resistentes y reutilizables.
- Como se dijo anteriormente, se pueden reutilizar. Su primer uso es más dedicado a la industria de alimentos o químicos, pero posterior a ello pueden emplearse en otras áreas.
- Son envases totalmente seguros.
- Resisten a trayectos de transporte y almacenamiento en almacenes sin importar la temperatura.
- Son permeables al aire, creando una barrera contra el polvo y la humedad. Esto es vital para una óptima conservación de los productos en su interior.
En conclusión, los sacos de rafia son un elemento de envasado realmente útil y polivalente en diferentes áreas de industria y alimentación. Puede adaptarse a diferentes necesidades, desde el pienso para animales, hasta el envasado de harinas, cereales o especias.